viernes, 7 de octubre de 2011

Mi nueva forma de ser

Escribir, cliquear y descubrir aquella frase que se me quedó marcada. “Dime amigo: ¿La vida es triste o soy triste yo?” Pensativa, me puse a reflexionar sobre lo que acababa de leer… ¿es triste mi vida o lo soy yo…? Sinceramente no supe que pensar pero de pronto lo comprendí. No era mi vida si no más bien yo. Acostada, mirando al techo, pensé en todo lo que sentía en ese momento rabia, tristeza y felicidad; que bipolar pensé. Más detenidamente llegué a la conclusión de que sentía rabia hacia mí misma por haber gritado a una persona que quería mucho sin tener culpa de nada. Tristeza… es un caso aparte... ¿Felicidad? Sí, me sentía feliz de tenerlos a todos… a ellos… a algunos más especiales que otros pero sí, cuando acabe de gritar, de llorar, de casi despertar de esa pesadilla los vi a ellos sonrientes… alumbrando la oscuridad que me rodeaba, susurrándome que todo iba a ir mejor que volvería a aprender lo que olvidé… aprender a a reír y a sonreír sin tener que hacerlo a la fuerza, a poder levantarme por mis propias fuerzas sin tener que depender de nadie, a poder mirar de nuevo las pequeñas cosas que me hacían sentirme feliz cada día, a mirar con buenas perspectivas todo lo que me rodeaba. Eso pensé hasta hoy… cuando desperté empecé a flaquear de nuevo, como si lo que hubiera visto el otro día nunca hubiese estado. “¡Que borde estás!” “Si estoy borde déjame” “Como quieras… pero dime… ¿qué te pasa?” “Nada que tengo sueño” “No, algo te pasa y no lo quieres contar” “¡Joder! ¡He dicho que estoy bien dejadme de darme el puto coñazo!” “Vale…yo sólo quería ayudarte tía…tampoco te pongas así…” “Pff… lo siento… por haberme puesto así…tengo sueño, nada más ¿vale?” “Bueno…vale…” , palabras que se repiten constantemente en mi día a día… odiándome a mí misma por ser así con quien me importa de verdad pero… ¿y qué puedo hacer? Soy así y no creo que vaya a cambiar… si ya cambié demasiado y no me gusta para nada mi nueva forma de ser, si ya olvidé completamente a sonreír y a reír con todas mis fuerzas, si ya me pesa la sonrisa demasiado… Si ya no tengo  ganas de estar con nadie, intento que mi presencia sea invisible para el resto que me rodea… porque sé que si intento hacerme notar puedo hacer mucho daño a quien quiero… por eso, decidí  auto aislarme de todo y de todos y empecé a ir por el camino que nadie quiere estar o que muchos desean…


No hay comentarios:

Publicar un comentario