miércoles, 28 de diciembre de 2011

Y ahora me pregunto... ¿Que fue de aquel tren que tanto yo esperaba? El tren que quería ir a buscar. El tren que me llevaría a donde pudiese reír todos los días de mi vida sin parar. El tren que intenté por todos los medios saltarlo y subirme a uno de sus vagones. Quise buscarlo, quise hacer lo que pudiese por mí misma; lo único que conseguí fue destruirme a mí misma por buscarlo desesperadamente.

Ya se lo que pasó con esa estación que perdí; fue destruida. Fue destruida por las palabras, por los pensamientos; cosas que creí que eran mis amigos íntimos, cosas que pensé que ayudaban a aliviar mi alma. Clavándome puñales inyectados de un letal veneno. Clavándome espinas heladas e incandescentes sin parar, ardiendo y helando mi ser al mismo tiempo. Lento, rápido, lento... Así es el ritmo con el que me mato a mí misma. Y ahora como una estúpida me ahogo en llanto, me ahogo en todo lo que me hace daño, me ahogo en mí sin poder evitarlo...

jueves, 22 de diciembre de 2011

Atrapada

Envenenada por completo. Envenenada de miedo al sentir aquellas miradas en mi espalda, como un hierro incandescente introduciéndose más y más dolorosamente. Oyendo pero sin oír aquellas palabras que seguramente estarían diciendo de mí. Sintiendo aquella impotencia de no poder hacer nada, bueno... sí, esconderme. Esconderme detrás de ellas para que no me viesen; con el asco en sus miradas y mi asco interior atormentándome aquellos pequeños pero eternos minutos. Encerrada en mis pensamientos nuevamente, mirando hacia un lado y otro; no me estaban viendo, estaban a lo suyo, pero aún sentía esas miradas clavadas en mí; ese maldito veneno que no me dejaba tranquila. Y a la hora de deshacerme de aquellas telas junto con su mirada, no pude hacerlo, tenía demasiada vergüenza y asco como para hacerlo. Hasta que se fue permanecí callada y de pie, sin moverme, con aquellos pensamientos atormentadores que no paraban de reproducirse una y otra vez. Escondiéndome nuevamente en mí y en mí misma. Atrapada y asqueada.

martes, 20 de diciembre de 2011

domingo, 18 de diciembre de 2011

Golpe

Y ahora mis grandes preguntas son... ¿qué coño sabrá ella de por qué me hago cortes? ¿Qué coño sabrá ella de lo que siento? ¿Qué coño sabrá ella ahora de mí? Mientras ella me decía que yo no sabía nada de ella, esas preguntas sonaban fuertemente en mi cabeza y sin poder evitarlo más dí un fuerte golpe en la pared y eché a correr hacia la cocina y después hacia el cuarto de mi hermano donde unas amargas lágrimas caían sobre mi rostro mientras que ingería aquellas pastillas.

Quería salir corriendo de esa casa, quería volar, quería alejarme para siempre de todo y de todos...

sábado, 17 de diciembre de 2011

Noria

Con el Ipod en mi bolsillo, perdiéndome en la calidez de la música frente a un enorme frío de invierno. Con mi cabeza agachada y escondiéndome en mi larga melena ocultaba unas lágrimas que habían comenzado a salir hace una hora atrás. Con el silencio de la noche, me sumergí en los rincones más desconocidos que yo había visto jamás. Eran las once, el teléfono no había parado de sonar. Unas llamadas eran desde el móvil de mi padre, otras de mi madre y algunas de amigos; sin darle importancia a su preocupación seguí avanzando perdiéndome aún más de lo que ya estaba.
Y de repente lo vi. Un camino de arboles con las típicas luces de navidad, tenía la sensación que habían estado toda la vida allí para esperarme. Con una sonrisa en la cara me sumergí en la magia de aquellos árboles, pese a mi negativo gusto por la navidad, disfrutaba como nunca y entonces ahí la vi. Alta, imponente, muy superior a mí; ahí estaba una gran noria. Como una niña pequeña corrí hacia ella, tenía muchas ganas de montarme en ella. Me sorprendí al no ver a nadie por allí, ni al señor que siempre te da el ticket, simplemente al llegar la noria se paró y me dejó entrar. Sola... sin nadie en ningún otro asiento, en la imponente sólo estaba yo. Miraba con delicadeza las luces de la ciudad, maravillada por aquel juego de colores brillantes, pero, con extrañeza observé que no había ninguna persona, todo estaba vacío... Con la mirada fija me dí cuenta que estaban apareciendo en mi interior recuerdos desagradables que se reproducían una y otra vez lentamente y otros muy felices que pasaron veloces, sin poder deleitarme de ellos. Cada vez más y más lentamente los desagradables se convirtieron en los más amargos de mi vida. Temblaba, lloraba y gritaba en aquel sitio tan alto; el móvil sonó nuevamente pero no eran mis padres era ÉL. Con la mano temblorosa pulsé el botón de llamada y sin dejarle formular la típica pregunta de que dónde estaba, con un susurro le dije: "Perdóname por todo, adiós. Te amo...". Y en lo más alto de aquella noria, con el alma fuera del cuerpo, salté...

viernes, 16 de diciembre de 2011

Requiem

Y allí estaba ella. Con ojos que estaban a punto de estallar en lágrimas. Se detuvo delante de aquel armario y con algo de miedo cogió algo tan beneficioso como letal y fue corriendo a su cuarto. Se sentó y puso música, aunque para ella seguía sonando aquella sinfonía de Requiem. Con manos temblorosas cogió una detrás de otra y fue tragando hasta diez como mucho o como pensaba ella "como mínimo". Rogándole a aquel Dios, en que ella no creía en absoluto, que se la llevase lo más pronto que él pudiese...

miércoles, 14 de diciembre de 2011

Bite and Kiss



Muerde, con tus afilados e inmaculados colmillos, profundamente en mi piel. Muerde tan fuerte que hagas fluir mi sangre por el suelo, arrancando todo veneno que tenga dentro, arrancando el odio hacia personas y hacia el mundo, arrancando todo pensamiento que llevemos yo y mi otro yo. Muerde hasta cuando sea lo suficientemente consciente de que tengo que despertar de la pesadilla en la que estoy sumergida. Muerde sin ningún remordimiento y pena alguna. Muerde hasta que ese veneno interno sea eliminado para siempre...



Dame el beso de la muerte... Dame el beso de Judas... Agárrame con fuerza del cuello hasta dejar que mi aliento se vaya con el ritmo del aire, posa furiosamente tus helados labios sobre los míos. Saca mi alma muerta de este cuerpo perdido, sin rumbo, sin tener conocimiento ya de dónde está la luz y dónde la oscuridad. Saca todo recuerdo doloroso y desgarrador que haya permanecido en mi ser. Saca mi ser muerto y acéptalo como regalo para que tengas otro ser sumido en lo más profundo de su infierno gélido y doloroso...

martes, 13 de diciembre de 2011

Eat

Mi mente de nuevo me la volvió a jugar hoy... A cada bocado que daba, iba sintiéndome aún más y más culpable, iba sintiendo ese asco interno que me invadía cada vez que lo hacía. No quería hacerlo, no quería que la comida entrase en mí. Mi mente me decía que no, pero mis actos no fueron capaces de hacerle caso y continué haciéndolo.

Después de terminar, recogí lo que había puesto y lo llevé a la cocina. De vuelta a mi habitación pasé por el salón donde para volver a mi cuarto necesitaba pasar delante del espejo que habían puesto allí. Con una mirada de asco y odio fui dando grandes pasos hacia mi habitación y de nuevo allí estaba mi enemigo desde que tenía nueve años, el que creo que un día será la causa de mi muerte, el que provocó que nuevos tatuajes invadiera mi brazo izquierdo. Un enemigo al que no pude vencer y me sometió, de la manera más cruel y despreciable, a su merced sin poder evitarlo. 

Sentí repulsión al ver reflejada la persona que más asco tenía, tengo y tendré en este mundo. "Hazlo" empezó a decir mi mente; "Hazlo otra vez, hazlo... Haz que no llegue, saca lo que llevas dentro, toca esa campanilla y saca tu amargura y sufrimiento" Y ,como una marioneta, iba a salir de aquella habitación para ir al baño, pero, algo me detuvo. El sentimiento de traición que me iba a invadir después de hacerlo hizo que regresase hacia donde había permanecido sentada. El olor de la derrota inundó aquella caja de ladrillos, armoniosa, cálida y observadora de mis más profundos secretos; a la vez que el sentimiento de repulsión iba aumentando cada día.

domingo, 11 de diciembre de 2011

Sola con mi sombra

Una tarde como otra cualquiera en la que habíamos quedado muchas personas en aquel sitio que nos gustaba tanto, una tarde en la que no tendría que haber salido y quedarme en casa a pesar de que no quería estar allí.

Risas forzadas con ella en el autobús, risas forzadas en casa de los dos hermanos. Caminamos por aquella cuesta para recoger a dos amigos nuestros y de ahí fuimos a dar un paseo por la playa. Éramos pares así que debí suponer que ninguno de los presentes se quedaría solo o sola. Que estúpida fui al pensar en eso... a medida de que avanzábamos una pareja iba cogida de la mano mientras otros sólo se dedicaban a charlar o a reírse de algo. Miré a mi izquierda y a mi derecha, nadie... estaba completamente sola, lo único que me acompañaba esa tarde/noche fue mi sombra.

Al final me dí cuenta que para no estar sola debería ser yo quién se acercase pero por más que me acercase parecía que preferían estar con otras personas, así que dejé de intentarlo ya que de todos modos había estado sola toda la noche.

Ya una vez de vuelta a casa, que íbamos las tres, pensé nuevamente en que no estaría tan sola como antes pero pocas veces hablaba y me dediqué a escuchar lo que estaban hablando ellas dos. Cuando nos despedimos ellas dos se fueron juntas, ya que vivían al lado, y yo me fui nuevamente sola acompañada de mi sombra y de la música. 

jueves, 8 de diciembre de 2011

Mente

Me tiro al suelo. Cierro mis ojos. Música aleatoria y de mientras se va reproduciendo empiezo a escuchar las canciones de mi vida...Sintiendo el frío pero agradable tacto que producía el suelo en mi piel. Respiro profundamente intentando olvidarme de mis cinco sentidos. Visualizando aquella puerta que al más mínimo roce me llevaría al lugar donde siempre me escondo, donde escucho mis voces internas que no paran de agobiarme, al lugar donde es muy difícil que alguien penetre... a mi mente. Escuchando aquellos pensamientos que no cesaba de hablar, algunos se repetían sin parar otros iban y venían, otros se quedaban durante un corto o largo tiempo. Palabras que tomaban forma de personas que odio o que simplemente tengo ese veneno que me recorría a veces por dentro, envidia. Una y otra vez como un disco rallado, se repetían aquellas palabras por las que huía, aquellas tres palabras que se introducían en lo más profundo de mi ser... "No eres nada".

Recorro pasillos de grandes y cortas distancias, van apareciendo miles de salas en los que contienen miles de libros. Recuerdos. Pasado, uno que me atormenta y que quisiera borrar. Presente, lo que me rodea. Futuro... una sala vacía, un libro con solo una portada. Un libro estallando en deseos de ser empezado lo más pronto posible. A tientas, por una abrumadora oscuridad que me absorbía por completo, de pronto un papel con letras ardiendo me volvían a decir aquellas palabras. Sin fuerza alguna echo a correr sin mirar atrás, ahogando un profundo grito que hace que de inmediato abra nuevamente los ojos y  vuelva a la realidad. Me miro otra vez en ese maldito objeto que reflejaba a la persona que más asco y odio tenía. Miraba su rostro tembloroso y angustiado y chillando vio nuevamente el veneno transformado en palabras que la atormentaba.

lunes, 5 de diciembre de 2011

Felicidad

Felicidad... algo que había dejado de sentir hasta hoy. Hoy me había sentido inmesamente feliz. Reír de verdad, hacer locuras como siempre, reír como hacía antes... Son pequeñas cosas que me hicieron pensar que no tenía el alma tan muerta como pensaba. Pequeñas cosas como los abrazos, las risas, los mareos que tuvimos a causa de ese aparato giratorio que tuve con mi Peque. El grito que le dí al conductor del coche por una confusión mía que hizo que no parase de reírme de él. Las largas charlas que tuvimos Noemi y yo, ya que hacía mucho tiempo que no hablábamos. Ese pequeño perro que vimos que hizo que mi corazón se envolviese en ternura o con el otro perro que era mucho más grande que hizo que estallara en risas ya que a ellos y a ella les daba miedo... Pequeñas cosas... que me hicieron sentir la persona más feliz de todos los que me rodeaban. Aunque perfectamente sé que esta felicidad la experimentaré pocas veces pero haré lo que muchas veces les digo a mis amigos "disfruta del momento".

domingo, 4 de diciembre de 2011

Guerra

"Guerra" una palabra que puede ser tanto interna como externa, una palabra que siempre trae cosas malas y nada bueno. Guerras con un alto valor de importancia u otras guerras que empezaron por motivos ridículos...

Mi guerra externa son las palabras de las personas. Recibo día a día más adjetivos negativos que positivos. Palabras que año tras año han quedado guardadas en lo más profundo de mi ser, palabras que aunque algunas no hayan sido dichas en serio han hecho mucho daño en mí. Palabras que han hecho en mi alma una profunda herida que no quiere cerrarse...

"Ojalá muchas chicas fuesen como tú" Esas son, algunas veces, las habituales palabras que me suelen decir y yo como siempre con una sonrisa digo la única palabra que se me ocurre "Gracias". Pero a raíz de eso comienza mi guerra interna, mi mente dice que quiere creerlos que sirvo para algo, que soy lo que ellos dicen pero mi corazón no quiere creerlos. Ya han sido tantas palabras negativas hacia mi persona que ya no quiero creer, perdí la palabra creer y valioso en mi diccionario y ahora, ya no quiero creer que tengo valor alguno.

Una guerra constante y dolorosa en mi ser. Una guerra en la cual batallan las palabras: las de ellos, las de mi cabeza y las de mi corazón. Una guerra que no quiere terminar.

sábado, 3 de diciembre de 2011

Palabras para una amiga

En la pareja o rollo como sea siempre se tiene miedo de ser dañado o de dañar o que jueguen contigo siempre se tiene ese miedo cariño por supuesto que te ilusionas como todo el mundo pero TU en TUS sentimientos no mandas dices que no pero tus sentimientos te dicen que si que quieres quererlo y tu te empeñas en decir que no para no sufrir más de lo que has sufrido...

viernes, 2 de diciembre de 2011

Otro premio (el de mi cari (L))




 Así que aquí van los premios:
1.Mencionar quien te otorgó el premio:
http://sentimientos-de-la-adolescencia.blogspot.com/

2.Entrega a tus blogs favoritos.
 http://sentimientos-de-la-adolescencia.blogspot.com/
 http://un-angel-en-paris.blogspot.com/
 http://hate-and-love-13.blogspot.com/
 http://princesadeaqueldream.blogspot.com/
           
 3.Nombra 3 razones por las que creaste tu blog:
  1-Porque mi cari me animó a hacérmelo.2-Porque mis palabras más internas es la única cosa que nadie podrá callar de mí y por eso las escribo. 3-Porque para mí es un método de huida.


 4.Nombra 3 prendas de vestir favoritas:
 Sudaderas, vaqueros y leggins (o como se escriba xD)


5.Colores que te identifiquen:
Mi favorito es el Rojo, luego el Azul y el Naranja.

6.Agrega una linda foto tuya.
 Lo de linda es broma ¿no?
Pregunta del premio: ¿Si un tomate hablara qué le dirías?
Que si es muy dura la vida del tomate y que tuvo que hacer para serlo.

                                       Pues ahora voy a cantar la canción de Pikachu :D